Auto Check-in, CRM y Wi-Fi superpotente: cómo la tecnología puede ayudar a los pequeños hoteles, B&B y casas de vacaciones
Con la llegada de la Era Digital y los continuos avances tecnológicos, los alojamientos turísticos han evolucionado, encontrando nuevos servicios concebidos tanto para proporcionar a los huéspedes el máximo confort como para ayudar a los operadores a gestionar su trabajo de forma más sencilla y organizada.
Un ejemplo particularmente eficaz resulta ser el Auto Check-in o check-in automático, que permite a los huéspedes entrar directamente en sus habitaciones sin tener que interactuar directamente con el personal de los hoteles, B&B y casas de vacaciones, sino utilizando herramientas y soluciones domóticas proporcionadas por el propio alojamiento.
Vamos a ver pues cómo la tecnología puede ayudar a los hoteles, los B&B y las casas de vacaciones a trabajar de forma más eficiente y ofrecer a los huéspedes un servicio innovador e inteligente al mismo tiempo.
La tecnología sin contacto aumenta la confianza de los viajeros
Un reciente artículo publicado en PhocusWire ha despertado especial interés y curiosidad por su provocativo título:
Pero, ¿realmente los clientes prefieren las soluciones sin contacto a los servicios ofrecidos por personas de carne y hueso?
Y si es así, ¿qué pasará con el servicio al cliente y el propio concepto de “hospitalidad”?
Un ejemplo bastante concreto que demuestra que los huéspedes no se preocupan por los servicios humanos lo tenemos ante nuestros ojos y tiene que ver con el sector de los alquileres de vacaciones.
Imagínate la experiencia de una casa de vacaciones: el huésped hace su reserva online, recibe la confirmación, las instrucciones para el Auto Check-in y toda la información necesaria antes de su llegada. Una vez allí, entra en el piso de forma autónoma, disfruta de su estancia y cierra sus maletas el día de la partida, todo ello sin ninguna intervención humana.
Es más, el equipo o el propietario del establecimiento se centra en trabajar meticulosamente en el cuidado del alojamiento, la optimización de los servicios físicos y digitales, la gestión y distribución de los ingresos, el marketing, la limpieza, el mantenimiento, el servicio de atención al cliente in situ y mucho más.
Esta actitud “entre bastidores” por parte del equipo del hotel es especialmente apreciada por los huéspedes que prefieren esta forma de independencia para sus vacaciones y que aumenta enormemente su confianza.
No hay más que ver las estadísticas de 2021 sobre los ingresos totales del sector de los alquileres de vacaciones en Estados Unidos, que alcanzaron los 13.300 millones de dólares. También es interesante señalar que aproximadamente una de cada ocho personas ha estado en una casa de vacaciones. Se prevé que en 2025 casi una de cada cinco personas se habrá alojado en una casa de vacaciones.
Estos datos son importantes porque confirman que muchos viajeros ya han experimentado la hospitalidad sin personas y están dispuestos a seguir disfrutando de esta nueva forma de viajar.
Algunas tecnologías que mejorarán la gestión de los establecimientos turísticos
El objetivo de la tecnología en el mundo de la hostelería es hacer más con el menor gasto de tiempo, dinero y recursos posible, teniendo siempre como prioridad la satisfacción del cliente.
Aquí hay pues algunas tecnologías que pueden mejorar significativamente la gestión de hoteles, B&B y casas de vacaciones:
- Auto Check-in, para reducir las colas y los tiempos de espera en la recepción;
- Chatbot en el sitio web, para proporcionar asistencia las 24 horas del día;
- CRM (Customer Relationship Management) para seguir todo el Customer Journey del huésped, desde la solicitud de un presupuesto hasta su regreso a casa;
- Wi–Fi rápido, para satisfacer las necesidades de los viajeros cada vez más hiperconectados;
- Soluciones domóticas para gestionar los establecimientos de forma más inteligente, eficiente y sostenible.
La lista podría ser interminable, ya que las tecnologías actuales pueden reducir considerablemente las necesidades de personal y los costes laborales en todas las fases de la prestación de servicios, tanto físicos como digitales, desde el contacto con el cliente antes de su llegada hasta los servicios in situ y la fidelización después de la estancia.